jueves, 9 de mayo de 2013

Como soy indecisa y no estoy acostumbrada a tener opiniones categóricas, empezaría este texto con un quizás o un tal vez, si tal vez sintiera que uso demasiado la primera opción. No lo sé. Me queda añorar los días negros por no ser consciente en aquel entonces de su negrura. Y añado, ahora que no es la hora del tiempo olvidado, que con duda pienso la noche, a ver si racionalizándola desaparece el dolor.

sábado, 4 de mayo de 2013

cada suspiro se precipita a la asfixia
dejaré de existir
en la verdad del loco
en la agonía del que espera

la noche es mentira:
no hay momento para
el reposo

solo el imposible parpadear
del muerto que duerme
el fin del sueño